Pintar paredes día tras día no es lo más emocionante del mundo. Tres trabajadores machos alemanes deciden romper su rutina jugando con sus pinceles. Se salpican con pintura blanca, poniéndose duros y calientes. Las cosas se ponen serias, besos, chupar pollas grandes, lamer bolas sonoras. Uno en el grupo resulta ser un verdadero fondo al que le encanta dar su trasero y ser follado por grandes pollas duras de hombre macho. ¡Un 2 contra 1 caliente en el trabajo, perfecto para rociar las paredes con esperma blanco! Para los fanáticos de los tríos gays.